por Juan Pascuau Guerreo
publicado en el catalogo de la exposición de pintura Homenaje de Úbeda a Francisco Palma Burgos, celebrada en el Salón de Actos de la Escuela de Maestría Industrial, del 28 de septiembre al 4 de octubre de 1962
publicado en el catalogo de la exposición de pintura Homenaje de Úbeda a Francisco Palma Burgos, celebrada en el Salón de Actos de la Escuela de Maestría Industrial, del 28 de septiembre al 4 de octubre de 1962
Un día del año novecientos cuarenta y tantos llega a Úbeda Francisco Palma Burgos. Una cofradía de Semana Santa le había encargado la plasmación de su imagen titular. Fue la "toma de contacto". Desde entonces, el artista malagueño advierte la savia ubetensista circulando, ascendente, pujante, ineludible por su inspiración. Desde entonces Úbeda se impregna de la influencia de Palma Burgos y hay como un nuevo renacimiento —iconografía, retablos, pasos procesionales— en los temarios predilectos del arte religioso ubetense. Úbeda y Palma se identifican, durante un tiempo, de tal forma que él (no me llaméis exagerado) se convierte casi en un motivo turístico de la capital de la Loma. Una vez oí de un viajero ilustre:
— Tres recuerdos ubeteses, perdurarán en mi vida: El de la Iglesia de El Salvador, el del Palacio de las Cadenas y... el del taller de Palma.
Ahora, en esta feria de 1962, Francisco palma Burgos, vuelve a Úbeda. Vuelve su obra, su arte revalidado en ltalia. En Castell San Elía, junto a Viterbo, cerca de Roma, el autor de nuestro "Cristo de la Columna", de "El Santo Entierro", del trono de "Jesús Nazareno"... ha encontrado en la pintura nuevo campo para su recia, fragante y original inspiración. No usamos caprichosamente de estos adjetivos. Pintura recia, insuflada de ciertos "colosalismo" nos ofrece Palma en algunos cuadros de esta Exposición. Pero, como contrapunto, pueden admirarse en la misma sutiles creaciones de un post-Impresionismo de dificilísimas improvisaciones, tal un delicioso paisaje de costa que figura en el catálogo. En cuanto a su originalidad, emancipada de ismos, es tarea fácil constatarla.
Motivo de singular complacencia —creo— es para Úbeda este "regreso" de Palma Burgos, Primera medalla de Oro de Castell San Elias, en lo Exposición de Pintura Extranjera. Motivo de vivo júbilo porque los triunfos del artista del taller de Santo Domingo son, un poco, triunfos de Úbeda, la ciudad que él eligió y que él —"Paco" para sus amigos— lleva siempre en fervor fecundo izada en su corazón.
— Tres recuerdos ubeteses, perdurarán en mi vida: El de la Iglesia de El Salvador, el del Palacio de las Cadenas y... el del taller de Palma.
Ahora, en esta feria de 1962, Francisco palma Burgos, vuelve a Úbeda. Vuelve su obra, su arte revalidado en ltalia. En Castell San Elía, junto a Viterbo, cerca de Roma, el autor de nuestro "Cristo de la Columna", de "El Santo Entierro", del trono de "Jesús Nazareno"... ha encontrado en la pintura nuevo campo para su recia, fragante y original inspiración. No usamos caprichosamente de estos adjetivos. Pintura recia, insuflada de ciertos "colosalismo" nos ofrece Palma en algunos cuadros de esta Exposición. Pero, como contrapunto, pueden admirarse en la misma sutiles creaciones de un post-Impresionismo de dificilísimas improvisaciones, tal un delicioso paisaje de costa que figura en el catálogo. En cuanto a su originalidad, emancipada de ismos, es tarea fácil constatarla.
Motivo de singular complacencia —creo— es para Úbeda este "regreso" de Palma Burgos, Primera medalla de Oro de Castell San Elias, en lo Exposición de Pintura Extranjera. Motivo de vivo júbilo porque los triunfos del artista del taller de Santo Domingo son, un poco, triunfos de Úbeda, la ciudad que él eligió y que él —"Paco" para sus amigos— lleva siempre en fervor fecundo izada en su corazón.
